Matrimonio. Una palabra que supuestamente represanta la unión de un hombre y una mujer, para comenzar un viaje vital basado en el amor y en el respeto. Y en un tormento para los que NO formamos parte del matrimonio.
Lo primero de todo es la boda en si misma. Una de las mayores crueldades que le puedes hacer a un conocido es invitarle a una boda. Los que se casan lo saben, y por eso conceptos como "boda pequeña" son 80 invitados, "boda normal" 200 y "boda de ensueño" 500. Cuanto más se joda, mejor.
Y que sí Mariconchi y Manolín, que me alegro mucho que os caséis, ¿pero porque me te teneis que joder a mí? Que los que os quereis sois vosotros leñe. Que eso de "ser participes de nuestro enlace" no se lo cree nadie. Lo que quereis es joderme bien jodido.
Para uno de los que NO se casa y no es más que un invitado (dios se apiade de padrinos y damas de honor) el matrimonio de unos conocidos es un gasto de dinero brutal, una inversión incluso. Empecemos, lo primero es que las invitaciones, ya no se envían. Ahora tienes que quedar con los novios para que te la den. Que digo yo, para que narices me das la invitación si te estoy viendo el careto, y encima me haces venir aquí. Luego esta el tema de la lista de bodas. Usease, los novios hacen una lista con lo que quieren que les regales... gracias hombre, yo creía que me estabas INVITANDO a una fiesta, pero veo que el amor SI tiene precio. Normalmente suelen añadir "aunque también nos puedes dar dinero" (dios, tanto romanticismo...).
Bueno, luego esta el tema de que por un misterio arcano el lugar donde se casan y el lugar del banquete están en puntos totalmente opuestos de la tierra. "La boda es en una ermita submarina y el banquete es en un volcán, para llegar solo sale un autobús cada 3 meses" Muchas gracias hombre, muchas gracias, pero después de darme el coñazo 10 años que llevamos siendo amigos y hablamos sobre lo rojo que eres, vas y te casas por la iglesia y en una puta ermita dejada de la mano de dios. Total, que son 50 minutos de coche, y otros 50 para llegar al restaurante. Es decir, ¿acaso iba yo a estar haciendo otra cosa el sábado? Y lo que a mi me preocupa... ¿como cojones has encontrado la puta ermita si no has salido de la ciudad en tu vida? ¿Hay una guía especial?
Pasemos a otro punto, la ropa. Si eres un hombre, tendrás tu traje de bodas, funerales, bautizos y entrevistas de trabajo. Es decir, EL traje. Pero claro, con cada invitación a una boda hay un 50% de posibilidades de que te siga valiendo... o no. Y si no, a perder otro día de tu vida (total, si días libres sobran hombre) a ir a comprartelo y gastarte el dineral. Si eres una mujer, habrás de comprarte otro traje. Sin discusión. Yo cuando he preguntado sobre este tema, me miran todas con cara de "¿Ir a una boda con el traje con el que he ido a otra? ¿Eres tonto o qué?
Añadimos el regalo, y ser participe de la celebración del amor sincero e incondicional ya te va costando 1.000 euros (regalo incluido), 4 días libres y el tener que aguantar maravillosas conversaciones de los que se van a casar sobre el viaje de luna de miel (mientras tú te quedas en casa comiendo pan duro para llegar a fin de mes).
Que maravilla, oyes. Bueno, estoy suponiendo que tus amigos que se casan y vives en la misma provincia que ellos... porque hay casos en los que te toca desplazarte cientos de kilometros (y tú que pensabas usar esos días libres para descansar... idiota). Pero dios te libre de recibir la invitación por correo. Ya te llaman por teléfono o aprovechando que estás por la zona te jodes y quedas con ellos.
Llegado el día de la boda, te tragas una ceremonia, esperas a los novios unas 3 horas para poder comer (nada más agradable que hacer esperar a los invitados) mientras se hacen 354727362768132465697432570927590834765 fotos y graban 174298765 horas de video paseando por los jardines. Bueno, al menos puedes pasar el rato haciendo chistes sobre lo de la novia de blanco. Hija, ahora podrás vestir todo lo de blanco que quieras, que yo te he visto con media botella de tequila encima, y eso fue solo el comienzo
Los banquetes de bodas se merecen un artículo de supervivencia, así que las dejamos.
Finalmente, se van de viaje. "Bueno, se acabó" pensarás. Iluso.
Después de pasarse 2 semanitas de vacaciones vuelven. Y se lo han pasado tan bien que quieren invitarte a cenar y contartelo. ¿Pero no se han planteado que mientras ellos estaban bebiendo daikiris y copulando como ratonucos yo estaba trabajando? ¿De verdad te crees que ver las coño fotos en tu portátil (huy, adivina quienes te lo compraron...) me interesa? Por dios, ya me has jodido 3 fines de semana, no me jodas más.
Porque los casados tienen una especie de necesidad física de hacer cenas. Y no saben cocinar ninguno de los dos, pero las cenas a tumba abierta. Ahora se lleva las cenas "frescas" "juveniles" "ligeras" que en realidad son una puta mierda de cosas sin cocinar que no quitan el hambre y provocan depresión. Después llega el video de la boda. Hombre, menos mal que estaba allí, que si no, a lo mejor le encontraba algún interés a estas 7 horas en DVD. Y luego las fotos. "Mira, mientras tu estabas trabajando yo estaba aquí en el Caribe... tienes mala cara, quieres otro sandwich bonduelle?" Ahora supongamos que dices "Oye, ¿y una copita?"
Olvidate campeón. Esos tiempos en los que esos dos tortolitos se mamaban y tu mirabas como tu amigo vomitaba en una esquina y la otra se quedaba dormida en la tienda de campaña, han pasado. Ahora de alcohol como mucho vino rosado. Sí, te vas a tragar 4 horas de DVD de una boda EN LA QUE YA ESTUVISTE a palo seco. "Bueno, me voy a fumar un cigarro"... COMO OSAS FUMAR!!!! Aparte de producir cancer, impotencia, estupidez, necedad y muerte segura, el olor se pega a las cortinas, cojines, sofás, mesas, sillas, personas y *NO SALE EN MESES* Así que te tienes que poner en la ventana de la cocina o terraza, pero eso es un descanso, porque los que no fuman se quedan dentro de la casa, viendo la tercera hora de banquete. Bueno, y si los que fumáis sois dos, éxito asegurado. Para que luego digan que es malo. Madre mía, de cuantos apuros me ha salvado el tabaco.
Bueno, ahora puedes pensar "Ya se ha terminado" ¡JA! Falta la cena de "enseñar el piso". Tú crees que ya viste el piso en esa noche maravillosa de visionado del dvd de la boda. Pero resulta que no. Así que toca, acudir de nuevo, pero esta vez el eje son las divertidas anécdotas de cuando compraron el bidé, el cristo con los del papel pintado, el ofertón del sofá, y ver el dormitorio. ¿Pero a quien narices le puede importar el ver donde folláis? ¿O que os hicieran un 5% de descuento en la nevera? ¡A mi lo que me preocupa es que en esa nevera no hay cerveza!¡Y que ya llevo 5 sábados por la noche tirados por la baza (la cual al parecer le sacasteis al vendedor con un descuento de 20 euros)!
Uno puede pensar, "bueno, como voy a sus cenas, ellos vendrán a alguna fiestecilla". En absoluto. Como mucho se pasarán por tu cumpleaños 10 minutos y luego a casita. Eso si van claro, que los casados son la gente más impresentable a la hora de quedar del mundo. Curiosamente, tienen un don, cuando te vean, hayan pasado 4 meses o 2 años, continuarán la conversación en el mismo punto en el que la dejaron. Es asombroso, es como si te hubieran congelado en el tiempo o algo. Haced la prueba, da miedo. Mucho miedo.
Llegados a este punto, quiero aclarar una cosa, hay casados que no han pasado por la iglesia. Hoy en día te casas por lo civil, la iglesia o el banco. No hay mayor lazo que una soga de 40 años de hipoteca pal pecho. Así que no os engañe la falta de anillos, si te invitan a una cena, te muestran cortinas o demás, están casados.
Hay otras cosas, las discusiones. Las discusiones las tienen los dos del matrimonio y curiosamente, tienes que ser parte de ellas. Manolo tío, te lo digo en serio, si has discutido con tu mujer... ¿Para qué narices me llamas a mí? ¡Si hace seis meses que no me llamas para nada! Y Mariloli... ¿Para que me llamas para saber si Manolo me ha llamado? ¡PERO SI ES QUE VIVIS EN LA MISMA CASA! ¿No le has oído hablar conmigo? ¿Y yo que se supone que tengo que decir? ¿Me pongo de parte de Manolo y que vayan a comer a casa de los suegros todos los domingos, o de Mariloli y que vayan domingos alternos y sábados? ¡Dios mío, gracias a que es domingo y que tengo que pasarme 3 horas al teléfono! ¡No vaya a ser que pudiera echarme una siesta!
En cualquier caso, da igual tu opinión. De hecho, no escuchan tu voz. Prueba a decir lo que te de la gana, hacer ruidos, que se ponga a hablarles uno que pasa por la calle. Da igual.
Normalmente la cosa suele acabar en divorcio (de eso ya hablaré yo luego) o en una cena de reconciliación con los amigos. ¡Pero si yo no he hecho nada malo, para qué me castigáis! Los temas de conversación de los casados una vez pasado el furor de estar recién casados gira hacia temas tan apasionantes como la hipóteca, el % del crédito, el seguro del coche y el trabajo. Vamos, lo mejor para divertirse un fin de semana.
Ahora en las cenas estas insoportablemente aburridas, se le ha puesto una guinda. Los juegos. Venga, saca el scattergoris y todo eso. Una curiosidad de estos juegos es que se basan en humillar a los participantes (Haz el pato borracho, interpreta corporalmente el color beige....) o en llamarles imbéciles (Así que no sabes cual es la nota número 345 de la septima sinfonía... paleto). Yo creo que los diseñan abogados especializados en divorcios, porque coño, son lo más competitivo del mundo.
Pero es uno de los escasos momentos en los que un soltero se regocija. Aquí se suelen hacer equipos, cada matrimonio un equipo y los dos solteros otro (no esperes que vaya a ver más de dos solteros... en todo caso SIEMPRE serán un número par). Los solteros arrasamos en los juegos estos. Palizas impresionantes. ¿Porque ganamos al de las películas? Porque seguimos viendo peliculas. ¿Porque ganamos en el de hacer gansadas? Es que seguimos bebiendo...
Lo siguiente menos malo que pueda pasar es que ganen los dueños de la casa. Eso es tolerable.
Pero que dios se apiade de tu alma si los que ganan son OTRO matrimonio. Buuuuf.... malo, malo. Muy malo. Que gane el equipo visitante se tolera si son unos solteros borrachos que malgastan su vida, pero que gane otro matrimonio, que encima se sacaron la nevera con un 1% más de descuento que los anfitriones... coño, en los juegos de rol no hay ganadores ni perdedores, algo mucho más sano socialmente que el dejar patente que los demás son GILIPOLLAS y tú MUY LISTO.
¿Y los embarazos y los niños? Que maravilla, que consumación más grandiosa del amor... y que coñazo para los demás. En serio, que no hace falta que me enseñéis la ecografía. Que por si no lo sabes, lo que me estás enseñando con tanta alegría son las entrañas de tu señora esposa y por ahí abajo la estoy viendo el chochete. Vamos, que tampoco me sorprende, que todavía me acuerdo de lo de la media botella de tequila... bueno, mejor no sigo, pero al menos confirmo que prefiero verlo desde fuera que desde dentro. El embarazo suele ir acompañado de unas 17 llamadas a la semana al amigo íntimo de la pareja (el que les quede, a estas alturas de tormento) en el que se cuentan con pelos y señales cosas realmente horribles, como mucosidad vaginal, ecografía, cambios de humor, broncas teleridigidas, y una llamada a las 5 de la mañana un martes de tu amigo para preguntarte donde se compra helado de pistacho, anchoas y el Tekken.
Finalmente, el niño nace, y he de reconocer que mira, eso si que es un momento de alegría auténtico y genuino. Los churumbeles nos caen bien, es algo genético. Además te puedes fumar un puro y beberte una copa sin problemas. Eso es cojonudo.
Uno de los mitos de los niños recién nacidos es que lloran por la noche, se despiertan, lloran más... nada, puro mito, los hijos de mis amigos duermen toda la noche de seguido, comen sin ningún problema, mean agua de rosas y cagan huevos de colibrí. Al menos eso es lo que me dicen. Lo de las ojeras y la mala cara debe ser porque se han vuelto heroínomanos o algo de eso. ¿El niño? ¡Jamás!
Eso si, me escama que cuando estás por allí, el niño llora, mueve cosas, se cae (es increíble, los bebé son los únicos seres que son capaces de caerse estando ya en el suelo) y no duerme ni 10 minutos seguidos. "Es que no esta acostumbrado a ti" (Ah vale!) Lo de que el niño no coma y vomite debe ser porque sigue sin acostumbrarse.
Aunque con los niños y la cena para ver al niño (bueno, comida, que el niño por las noches duerme 8 horas de un tirón) llega otro momento multimedia aterrador. El video del parto. En serio, que es que eso NO ME INTERESA NADA. De hecho, como no es ni mi mujer, ni mi hijo, lo encuntro particularmente ASQUEROSO. Podemos culpar a la sociedad, a la peli Desafío Total (con el wato saliendo de las tripas) o al hecho de que ver a tu mujer empujar con la cara al rojo y escucharla decir en voz baja y a mi lado: "Y ahora es cuando sale la placenta" es algo ASQUEROSO, pero es que no quiero verlo.
Y... oyes, cuando van y se divorcian... ¿que falta de respeto es esa? Encima los regalos se los quedan (¡toma ya!) y a tu amigo le da por recuperar su antigua vida como si no hubiera pasado ni un día. Esto es ir a bares que llevan 4 años cerrados, insultar procazmente a las mujeres mientras las llama por el nombre de su mujer, no darte ni un momento de respiro, etc,etc. Bueno, respecto a ella que decir. A las exnovias de amigos cuando te las encuentras por la calle, basta con saludar y pista. Pero la exmujer ya es otra cosa. Estuviste en su boda, viste como se juraban amor eterno (de hecho te costo 100 euros / hora) y has ido a cenar a su casa... así que te toca aguantar la vela y hablar con ella unos 55 minutos, en los que indefectiblemente te preguntará 45 veces "¿Y él qué tal está?" Y da igual lo que respondas. Ella SIEMPRE dirá: "Así que le va mal".
Así pues, ante una invitación de boda, el hombre moderno solo tiene una salida: tirarse por las escaleras más cercanas.